sábado, 6 de mayo de 2017

RESEÑA - Alien: el Octavo Pasajero - 1979






Se acerca el lanzamiento de “Covenant”, la nueva película del universo “Alien” casi 40 años desúes del comienzo de la franquicia y muchas secuelas derivadas de la primera de 1979. Por eso, me pareció buena idea volver a visionar la original…por tercera o cuarta vez creo (algo que no le hace daño a nadie, sino todo lo contrario). En fin, el primer parrafo es el que mas cuesta, y como no dice nade sustancial, los dejo con mi intento de reseña
.

 La Nostromo es una nave comercial. Durante su viaje de regreso a la Tierra reciben una transmisión desconocida a la cual están obligados por contrato a investigar. Una amenaza encontrará la forma de ingresar a la nave, desatando la paranoia y el terror entre todos; una ser que no parará hasta haber acabado con ellos.



Ridley Scott dirigió el guión escrito por Dan O’Bannon, contando con actores que a futuro desarrollarian grandes carreras en la industra: Sigourney Weaver en el papel principal, John Hurt participe en uno de los momentos mas memorables de la historia de las peliculas, y un Ian Holm que forma parte de una “vuelta de tuerca” del tipo de las que nos dejan impactados…y locos.

Scott, que en los años siguientes se convertiría en un director de culto gracias a peliculas como “Blade Runner” y “Thelma and Louise”, comenzó su carrera con fuerza de la mano del villano del espacio exterior. “En el espacio nadie te oirá gritar” profesaba la frase de promocion de la cinta. Nuestros portagonistas estan a la merced del vasto universo, sin nadie que pueda socorrerlos ante una amenaza repentina, y es de esta forma que el director exprime el jugo de uno de los terrores mas grandes que nos podamos imaginar: estar solos ante la inmensa oscuridad, sin saber que puede sucedernos, sin saber si algo va  atacarnos.



Con una mezcla de sonido que roza la perfección y un trabajo increible a la hora de recrear a la criatura espacial, la película se va superando a si misma cuando en determinado punto pareciera que no se podría llegar mas lejos.

La tensión bien construida se logra gracias a que el trabajo de cámaras, el guión y los personajes congenian de forma tal que todo lo que sucede en pantalla nos convence. La tensión en sus rostros, la mezcla de sonidos y los puntos oscuros de la nave; todo forma parte de ese gran truco de magia que intenta ser el cine: agarrar un puñado de gente en una sala (a un individuo si se ve la película sol@) y transportarlos a un mundo diferente en donde sus emociones se verán alteradas en miles de formas y colores por aproximadamente dos horas. Un truco que a veces, cuando el mago no es bueno, no logra convencer y vemos con facilidad como intentó hacerlo; pero cuando nos enfrentamos a uno de los magos mas talentosos como Ridley Scott, nos es imposible apartar la mirada de su trabajo y en ningun momento dudamos de la autenticidad de lo que nos presenta.



A lo largo de los años el cine ha tenido sus etapas de terror. El expresionismo Alemán nos dio grandes obras como “El Cabinete del Dr. Caligari” o “Nosferatu”, la epoca de los monstruos de la Universal tuvo como puntos altos a “Dracula” y “Frankenstein” entre otros. Son ejemplos de antaño, que vistos hoy en día evidentemente no logran el efecto que otrora supo hacer mojar los pantalones a mas de uno, pero que se mantienen como pilares fundamentales a la hora de hablar del género.

No se si Scott pretendía hacer una pelicula que nunca pereciera en la memoria del espectador, pero que lo logró, de eso no hay dudas. Como muchos cinefilos, gente entendida de cine y cualquier otra persona que tenga un poco de conocimiento de la historia del cine, creo que los 70s fueron una decada de quiebre en este, donde surgieron grandes talentos y clasicos de la gran pantalla. “Alien” evidentemente uno de ellos, pero como pocos, tiene la particularidad de que sigue funcionando de la forma en que lo hizo en sus dias de estreno, ¿o me equivoco?
Honestamente, no lo creería ni una sola palabra a alguien que me diga que no le corrió un sudor frio por la espalda la primera vez que vio a Ripley y compania, ya sea en los 80’s o ayer mismo. El miedo a lo desconocido cala hondo en nosotros, y es una receta que, bien elaborada, siempre va a funcionar…porque el miedo es miedo, en niños y adultos, y es de las pocas cosas de las cuales no podemos escapar.



Muchos dirán que la secuela, “Aliens”, dirigida por James Cameron (“Titanic”, “Avatar” y millones de dolares en su cuenta bancaria) es superior a la primera, pero allí entra una de las cualidades mas grandes del cine: en el, no hay una verdad absoluta. Mientras que en la de Scott se apelaba al silencio varias veces para generar la tension del ambiente, en la continuacion de 1986 atestiguamos un festival de sonidos metálicos, actitudes exageradas y una visión del futuro pesimista y casi apocalíptico (si, definitivamente es un trabajo de Cameron), que hace que la mente se desvíe mas del posible miedo que podemos sentir hacia las criaturas alienigenas, para centrarnos mas en la representación de ese mundo inventado.

Lo que no es cuestionable en “Alien” es la calidad y la vida de la cinta. No por nada se siguen haciendo mas y mas películas que de alguna u otra forma conectan con la original y estas siguen y siguen recaudando dinero. El cine tiene la capacidad de convertir las cosas en un fenomeno popular que no distingue generaciones, capaz al mismo tiempo de generar sentimientos tan dispares sobre algo en dos o mas personas. Pero vean el lado positivo: los genera, y despues de ver una película como esta, no solo la recordaremos por mucho tiempo, sino que tambien sentiremos que algo dentro nuestro cambió.

Tal vez sea una forma de vida extraterrestre que nos utiliza como huesped hasta estar pronta para salir al exterior…vaya uno a saber!



TITULO:
Alien
AÑO: 1979
GÉNERO: Ciencia Ficción – Suspenso - Terror
DIRECCIÓN: Ridley Scott
PROTAGONISTAS: Sigourney Weaver – Ian Holm – John Hurt – Tom Skerritt – Veronica Cartwright – Harry Dean Stanton – Yaphet Kotto


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