TÍTULO: Deadpool
AÑO: 2016
GÉNERO: Acción - Comedia
DIRECTOR: Tim Miller
PROTAGONISTAS: Ryan Reynolds - Morena Baccarin - T.J Miller
Luego de ser diagnosticado con un cáncer en la fase más complicada, Wade Wilson (Ryan Reynolds) se somete a un tratamiento experimental para encontrar una cura, sin saber que el único objetivo de esa “organización” es generar mutaciones en sus pacientes. Wade dejará de ser Wade, para convertirse en Deadpool.
Reynolds se calza las mallas rojas ajustadas, y en el papel de Deadpool otorga el rol por el cual seguramente será recordado en los años por venir. Como este mercenario, idiota e hijo de p***, pero por sobre todas las cosas, enamorado, Personifica a Wilson con un humor rebosante a cada segundo, lo que genera simpatía en el espectador. Nos lleva a su mundo y nos hace reír como pocas veces en años recientes frente a la gran pantalla.
Que se puede esperar de una película, cuando ya de entrada los títulos iniciales son graciosísimos y están intercalados con una secuencia que pareciera filmada y editada por los dioses? Muchos creerían que empieza en lo alto, pero que a lo largo del metraje baja su nivel. Es lo que ocurre en la mayoría de los casos, pero extrañamente no en Deadpool.
Gracias a su protagonista, sus efectos, su guión ácido y atrapante, y la enormidad de referencias al universo de los X-Men (con un particular ensañamiento hacia Wolverine), la película logra mantener su intensidad, dinamismo, velocidad y frescura durante cada uno de sus minutos.
Es decir, Deadpool vive en un cuchitril con una anciana ciega y adicta a la cocaína, es un antihéroe a quien no le importa más nada que su bienestar, y se regenera! La fórmula perfecta para un éxito seguro!
El argumento es al principio un poco entreverado, no por su difícil comprensión (en este punto es todo lo contrario), sino que constantemente viaja entre el pasado y el presente, flashbacks mediante o con Deadpool hablándole directamente a la cámara, ósea, interactuando con nosotros.
De buenas a primeras arranca la acción al 100%, ESA ES LA FORMA EXACTA DE COMENZAR UNA PELICULA SEÑORAS Y SEÑORES; es una secuencia simplemente magistral, y una gran forma de adentrar al espectador en la historia, ya que de haber sido lineal, de haber conocido la historia de amor de Wade en un principio, habría sido medio engorroso y difícil de soportar. Aunque el mismo Wilson lo deja muy en claro, esto es una historia de amor.
H U M O R Y V I O L E N C I A
Desde que los que no somos seguidores fieles de su comic, supimos de la existencia de una película del antihéroe de Marvel e investigamos o fuimos conociendo su personalidad, nos maravillamos imaginando como sería la adaptación; si fiel o no, y la verdad, es una genialidad.
Todo minuto está inundado de violencia y humor ácido por demás; lo crudo y gráfico se apodera de la pantalla, desde los desmembramientos y las regeneraciones de nuestro protagonista, hasta los chistes negros que uno pueda imaginarse, e infinitas referencias a otros superhéroes. Sin duda, esto se convierte en la atracción más grande de la cinta, al punto de que nos parece increíble presenciar todo lo que Wilson dice y hace; que su falta de interés en algo aparte de sí mismo sea tan grande.
Esto llevó a que obtuviera una calificación “R”, solo apta para públicos adultos, hecho que no imposibilitó su gran éxito alrededor del mundo, consagrándose como la película de calificación “R” más exitosa de todos los tiempos, adorada por el público y a su vez, bien recibida por gran parte de la crítica.
Este tipo de entretenimiento pareciera estar apuntado a las nuevas generaciones, a un público joven; sin embargo, “Deadpool” también sale victorioso en cautivar a un público mayor. Cómo? Con Wham! Una referencia sin duda pensada para aquellos en sus 30’s o 40’s, un aditivo nostálgico, una fórmula que parece ser más que efectiva al igual que vimos en “Guardianes de la Galaxia”, cuya banda sonora era rabiosamente ochentona, y que también cosechó un gran éxito en todo el globo,
Parece que todo añoramos el pasado, como que todo tiempo anterior fue mejor. Raro, verdad? Será que en 30 años mirarán para atrás, verán “Deadpool” y se sentirían de igual manera? No lo sé, pero lo que sí está claro, es que estamos viviendo la época dorada del cine de superhéroes, y debemos disfrutarla sin más. Una etapa que marcará la historia del cine.
VALORACIÓN: 7.5/10
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