sábado, 22 de octubre de 2016

Everybodys Want Some! (Todos Queremos Algo!) - 2016




En 1993 Richard Linklater, aun aprendiendo a caminar en la industria cinematográfica, sorprendió a muchos con “Dazed & Confused”, una película ambientada en 1976 que sigue un día en la vida de un grupo de adolescentes en su último día de clase.


La popularidad de la cinta fue creciendo, y con los años se hizo acreedora de un status de culto entre todo fanático del cine. Por mucho tiempo una secuela fue rumorada, hasta que en 2016 finalmente llegó esta “secuela espiritual”, que si bien no es una continuación directa de la original, comparten esencia y entusiasmo.
Convertido en un director experimentado y de renombre, “Everybody Wants Some!” es el 18vo largometraje de Linklater, y su más reciente lanzamiento.




Jake (Blake Jenner)
entra a la universidad becado por sus habilidades en el baseball. Allí conocerá a Finnegan (Glenn Powell) y su grupo de compañeros con quienes compartirá hogar. Sumado a esto, apenas llegado quedará flechado por Beverly (Zoey Deutch), opuesta al estilo de vida que llevarán ellos, pero que pareciera completarlo.

No esperen un problema central con una solución aparente porque no lo encontrarán. Es más, tampoco esperen un argumento atractivo y fácil de digerir, porque tampoco lo encontrarán. Porque en la vida real los problemas no se solucionan de forma fácil, y la complejidad frente a nosotros va aumentando a medida que crecemos. Linklater ha demostrado maestría a la hora de retratar las cuestiones de la vida a distintas edades a lo largo de su filmografía, y esta no es la excepción.





La película comienza a todo ritmo y con todo el poder cuando de fondo escuchamos “My Sharona” de los Ramones; y como supo hacerlo su predecesora, de la mano de Aerosmith y Alice Cooper entre otros, su banda sonora es en gran parte responsable de transportarnos a la época y asegurarnos de que vamos a pasar un buen momento.
Del mismo modo lo hace el vestuario, el cual sin ser demasiado espectacular y pasando desapercibido en algún momento, también funciona como herramienta necesaria para ese viaje en el tiempo que nos ofrece el director.


A lo largo de su carrera, Linklater nos ha bombardeado a preguntas, algunas con respuestas y otras no, sobre diversos temas de interés existencial para el hombre. Y es tal el talento de este señor, que lo transmite todo con una facilidad envidiable que lo hace atractivo para cualquiera que decida descubrir su trabajo.



En su trilogía de el “Antes..” (1995, 2004, 2013) es evidente que su interés recae en el amor, la juventud y las relaciones humanas; tocando otros temas de forma secundaria como el significado de los padres en nuestra vida y como nos vemos en el futuro, al igual de cómo nos imaginábamos que íbamos a ser cuando éramos jóvenes.

Mientras tanto en “Boyhood” su obra maestra indiscutida, la transición de niño a adulto joven, la destrucción del núcleo familiar y la subsiguiente creación de otro, la adaptación a este; el futuro incierto y el aprovechamiento de los momentos son lo primordial en el argumento.

“Everybody Wants Some” no es la excepción. Contando con reflexiones filosóficas de las más variadas, no debemos olvidarnos que al fin de cuentas son un grupo de jóvenes, por lo que el consumo de diversas sustancias, al igual que sus actitudes que parecen carentes de sentido pero que sirven para la diversión, forman parte de su objetivo final, el cual todos sabemos cuál es, ya que “todos quieren algo”




Al igual que en “Dazed and Confused”, Linklater decidió contar con un reparto prácticamente desconocido. A comienzos de los 90’s contó con Milla Jovovich, Ben Affleck y Adam Goldberg, quienes en los años que siguieron, con éxitos mayores o menores, se mantuvieron en el mundo del cine.

En esta ocasión llamó a casting a actores que tuvieran algún conocimiento sobre el deporte alrededor del cual gira la película, lo que queda en evidencia con los físicos de los protagonistas, quienes como en muchas ocasiones son mayores que los roles que representan, pero sin embargo logran resultados bastante buenos.





Entre todos, quien se lleva todos los aplausos es Glenn Powell. Este actor nacido en 1988, interpretando a Finnegan es una de las, sino la mayor atracción de toda la cinta. Es el jefe de la manada y el encargado de todo comentario hilarante al igual que filosófico, el que nos roba la mayoría de las carcajadas y con quien más nos identificamos.

Quién dice que de aquí a unos años, no haya una nueva camada de actores que le deban sus comienzos a Linklater?




En una época en donde el cine dirigido a adolescentes está plagado de adaptaciones literarias de best-sellers con realmente, poco contenido intelectual, “Everybody Wants Some” viene a cambiar un poco la imagen de este subgénero. No digo que las adaptaciones sean malas ni mucho menos; es más, en los últimos años ha habido algunas muy buenas como “Las Ventajas de ser Invisible” en 2011, “The Spectacular Now” en 2013 o la más reciente de todas, “Me and Earl and the Dying Girl” de 2015.

Se podría argumentar que al tener lugar en la década de los 80’s, la audiencia a la cual podría atraerle la película es una cercana a los 40 años. Sin embargo, es tal el ritmo de la película y la autenticidad de lo relatado, lo identificado que uno puede llegar a sentirse con ella, que funciona también en público joven. Además, esa sensación de nostalgia a pesar de no haber vivido esa época nos abruma a todos, por lo que la atracción que sentimos es instantánea.




Personalmente, esperé mucho por el estreno de la película. Desde que descubrí a Linklater con “Antes del Amanecer” me convertí en fanático y defensor de su cine; más aún cuando descubrí que una de las películas que marcó mi infancia, “Escuela de Rock” había sido dirigida por él. Y afianzó su lugar en mi corazón cinéfilo con “Boyhood”, no solo su mejor película, sino también una de las mejores de todos los tiempos.

Cuando se espera mucho por una película puede jugar en contra. Las expectativas son altas y fácilmente pueden decepcionar, más aun siendo la siguiente película luego de su obra maestra. Claro está que no está a la altura de su predecesora, pero tampoco creo que ese haya sido el objetivo del director.





“Everybody Wants Some” es una de esas joyitas pequeñas y desconocidas para el público general que la industria nos regala todos los años. Es un deleite para aquellos quienes conocen el trabajo de Linklater, y un gran primer paso para quienes no, pero que cuando se animen a descubrirlo quedaran perplejos por la calidad, enormidad y cualidad identificativa de su trabajo.




TÍTULO: Everybody Wants Some
AÑO: 2016
GÉNERO: Comedia Coming of age
DIRECTOR: Richard Linklater
PROTAGONISTAS: Blake JennerGlenn Powell Zoey Deutch Juston Street Wyatt RussellTemple Baker

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